La oposición debe buscar la Unidad Nacional presentando un proyecto país.
Ese proyecto de país debe, obviamente, ser democrático.
Que privilegie al individuo sobre el Estado.
Debe destacar la importancia de la libertad.
La libertad para el ejercicio de los derechos individuales, tales como, la vida, el respeto a la propiedad privada, el respeto a la familia, la libertad de conciencia, la libertad religiosa y la libertad de expresión. Que sea capaz de enfrentar la inseguridad física y jurídica.
Ese proyecto debe privilegiar la existencia de gobiernos limitados.
Ese proyecto debe privilegiar el Estado de Derecho. Que el único imperio sea el de la ley, que sea aplicada a todos por igual.
Ese proyecto debe velar por la existencia de una economía libre. La empresa privada garantiza esa economía que, obviamente, requiere de la existencia de un marco claro y limitado de normas sabias y pocas.
Debe destacarse en ese proyecto, el que haya separación de poderes.
El Estado debe ocuparse de sus funciones naturales como son el garantizar la seguridad y la vida de las personas. Que cobre sus impuestos pero pocos y bien definidos. Hacer y mantener obras públicas.
La oposición unida, con ese proyecto, defendiendolo en la calle, sin temor a ser llamada derecha, posteriormente, definirá, con métodos democráticos, que garanticen la participación de todos, quién puede ser el líder que enfrente al candidato Chávez.
No necesariamente, será un empresario, pudiendolo ser, pero, sin prejuicios, puede ser, también, un político. Tanto, en un sector como en otro, hay hombres y mujeres capaces de aceptar esa elección que comporta valor y decisión para asumir el reto.
Ese proyecto de país debe, obviamente, ser democrático.
Que privilegie al individuo sobre el Estado.
Debe destacar la importancia de la libertad.
La libertad para el ejercicio de los derechos individuales, tales como, la vida, el respeto a la propiedad privada, el respeto a la familia, la libertad de conciencia, la libertad religiosa y la libertad de expresión. Que sea capaz de enfrentar la inseguridad física y jurídica.
Ese proyecto debe privilegiar la existencia de gobiernos limitados.
Ese proyecto debe privilegiar el Estado de Derecho. Que el único imperio sea el de la ley, que sea aplicada a todos por igual.
Ese proyecto debe velar por la existencia de una economía libre. La empresa privada garantiza esa economía que, obviamente, requiere de la existencia de un marco claro y limitado de normas sabias y pocas.
Debe destacarse en ese proyecto, el que haya separación de poderes.
El Estado debe ocuparse de sus funciones naturales como son el garantizar la seguridad y la vida de las personas. Que cobre sus impuestos pero pocos y bien definidos. Hacer y mantener obras públicas.
La oposición unida, con ese proyecto, defendiendolo en la calle, sin temor a ser llamada derecha, posteriormente, definirá, con métodos democráticos, que garanticen la participación de todos, quién puede ser el líder que enfrente al candidato Chávez.
No necesariamente, será un empresario, pudiendolo ser, pero, sin prejuicios, puede ser, también, un político. Tanto, en un sector como en otro, hay hombres y mujeres capaces de aceptar esa elección que comporta valor y decisión para asumir el reto.
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Rafael Inciarte Bracho
Escritos en el Tiempo