Los beneficios de la libertad

La libertad implica responsabilidad. La responsabilidad a su vez lleva a la toma de decisiones y a asumir sus consecuencias.
Quien procede convencido de lo antes expuesto, no anda buscando a quien culpar de su fracaso, ni tampoco pensando en el pasado ni nada que se le parezca. Si en el ejercicio de mi libertad tuviera que fijar una posición acerca de quién me ha dañado, diria, los gobiernos. Esos, principalmente el presente, que llevaron al país, a Venezuela, a la devaluación en todo.
La libertad es un derecho natural. Por ella, como le dijera Don Quijote a Sancho, soy capaz de perder mi vida. Sin libertad no hay progreso. Chávez ha ido más allá de los gobiernos que le precedieron. Ha ido en contra de la libertad. Quiero expresar, con honestidad, que los que le antecedieron no fueron modelo en el respeto a la libertad, pero, en honor a la verdad, no existe comparación.
Desde Gómez hasta Carlos Andrés primero, en Venezuela no hubo devaluaciones. La moneda era fuerte.
Ahora quiero detenerme. Llevar la responsabilidad al plano personal.
Siendo joven contraje matrimonio. He estado casado con la novia de mi juventud.
Una vez casados asumimos el compromiso de unir nuestros ingresos que eran pocos. Nos propusimos ahorrar. No gastar más allá de lo ingresado.
Que conste que eramos muy humildes, aunque ahora, estamos al borde de volver a serlo aún cuando estamos haciendo lo imposible para que no ocurra, sólo que ahora tenemos una edad de la que generosamente llaman ¨tercera edad¨.
Retomo la idea. Antes de casarnos teníamos el hábito del ahorro. Confieso que ahorrar significa sacrificio, disciplina, responsabilidad, austeridad y previsión para garantizar el retiro.
Pues bien seguimos ese camino. Logré graduarme de abogado estando casado.
Destinaba el 10 por ciento de los ingresos al ahorro. A veces hasta más.
En Venezuela no había inflación. La moneda era fuerte.
El país vivió más de sesenta años sin inflación.
Cuando compramos nuestra casa, a crédito para pagarlo a treinta años, el interés era fijo, y la cuota mensual, también.
Podía uno hacer esto porque la economía era sana. Los gobiernos no eran disparateros.
Estoy haciendo uso de la libertad. Digo lo que pienso y creo.
Los gobiernos en Venezuela se hicieron irresponsables. Devaluaban. Caldera II y Chávez son campeones. Chávez principalmente que ha magnificado el populismo con el agravante de ir en contra de la libertad de los venezolanos, empobreciendonos sin compasión.
Hablar en Venezuela de clase media es reventar de ira. Yo no quiero eso.
Vivir de ingresos fijos en Venezuela, o de un salario, y ser honesto, es difícil. Por eso hay tanta delincuencia.
La solución pasa por la libertad, el sentido común y la experiencia en el ejercicio del gobierno. La prohibición número uno sería: que los gobernantes no puedan devaluar.
Sólo con una moneda fuerte, con un gasto público limitado, con libertad y Estado de Derecho podemos salir avante. No hay otra manera.