martes, 1 de noviembre de 2005

Felipe González, el Político y el Empresario

La política es la más excelsa de las actividades del ser humano. En ella se destacan las virtudes y las villanías del hombre, y también, la manera abnegada de servir a los demás.
La antipolítica, la más severa crítica a la política, que ha permitido llegar al poder a ciertos gobernantes, que son políticos, es propiciada para confundir, por no decir los verdaderos fines que se buscan con esa crítica.
Se interviene en política porque se quiere. En democracia se elige por el voto.
La elección por el voto produce la legitimidad de origen. Posterior a ésta deviene la legitimidad de desempeño.
La legitimidad de desempeño proviene del cumplimiento de las ilusiones del votante.
La legitimación de desempeño implica gobernar para todos.
El político gobernante en democracia tiene que respetar la pluralidad de ideas.
No es lo mismo ser gobernante que presidente de una empresa. Silvio Berlusconi, quizas uno de los más destacados defensores de la antipolítica, lo ha comprendido. ¨Hay elementos comunes entre la gobernabilidad de una empresa y la gobernabilidad de una nación, pero hay elementos de clara diferencia¨, afirma Felipe González.
La democracia no es una ideología. La democracia es necesaria para articular la convivencia entre los ciudadanos o con la pluralidad de ideas.
Yo diría que la democracia debe tener contenido. La libertad es su principal elemento. Sin libertad no hay progreso humano.
A la libertad le damos naturaleza y hablamos de libertad de emprender, que es la libertad económica; ésta es tan importante como la libertad de pensamiento, como la libertad de expresión, la libertad de elegir entre una u otra opción política.
Hablando de progreso humano, este se logra con una mejor redistribución del ingreso.
El molde económico expresado por Felipe González, que tanto beneficio social produjo a España durante su gobierno, es crear empleos y mejorar salarios; pero no es lo único, se requiere de más y mejor educación y más y mejor asistencia sanitaria. Sólo así podrán haber hombres y mujeres más capaces de competir en este mundo globalizado del presente tiempo.
Debe tenerse en cuenta que la democracia no puede existir sin el mercado; pero regulado con sabias, pocas y pragmáticas leyes, para que se cumplan. Teniendo presente que la ley ¨apunta el camino de la solución de un problema, pero no resuelve por si misma el problema¨ sostiene Felipe González.
El mercado puede cansarse de la democracia y entonces acude a un Franco o a un Pinochet o a un ¨modelo chino¨o a un ¨modelo cubano¨, que niegan la democracia.
Yo pienso que se impulsa a una izquierda para que, muy bien, redestribuya la miseria, y a una derecha que creando riqueza, no consiga nunca la manera de redistribuirla. Se acude al llamado ¨capitalismo salvaje¨que algunos atacan sólo de los dientes hacia fuera.
Fuente: Revista Zeta, edición 1517, del 28 de Octubre al 4 de Noviembre de 2005, Los Documentos, Hay que descripar al discurso político, Felipe González disertando sobre el buen y mal gobierno.

2 comentarios:

  1. es usted un... FAS-CIS-TA.

    eso.

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  2. este keikai es uno con muchas raresas...bueno todo sea por el respeto al derecho ajeno para vivir en paz...

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Gracias por comentar.
Rafael Inciarte Bracho
Escritos en el Tiempo