El miedo es natural en el hombre. Todos tienen miedo. Ese no es elproblema. El problema es dejarse dominar y paralizar por el miedo. El miedo es mal consejero, porque vuelve violentos a los cobardes y los mediocres temen perder su tranquilidad y prefieren volver aunque sea a la esclavitud del ¨siempre lo mismo¨. Desconfían de Dios. En cambio, el que confía en Dios sigue adelante aunque vea que el camino es largo, difícil y sacrificado. ! Hay que atreverse por el Señor! ¨La falta más grande del apóstol es el miedo. La falta de fe en el poder del Maestro despierta el miedo; y el miedo oprime el corazón y aprieta la garganta. El apóstol deja entonces de profesar su fe. ¿ Sigue siendo apóstol? Los discípulos que abandonaron al Maestro aumentaron el coraje de los verdugos. Quien calla ante los enemigos de la causa, los envalentonan. El miedo es el primer aliado de los enemigos de la causa. ¨Obligar a callar mediante el miedo, eso es lo primero en la estrategia de los impíos. El terror que se utiliza en toda dictadura está calculado sobre el mismo miedo que tuvieron los Apóstoles.
El silencio posee su propia elocuencia apostólica cuando no se retira el rostro ante quien lo golpea. Así calló Cristo. El no se dejó aterrorizar por los hombres. Saliendo al encuentro de la turba, dijo con valentía: ¨Soy yo¨. ( Cardenal Wyszynski, citado por Juan Pablo II en su libro ¨Levantaos! vamos¨).
El silencio posee su propia elocuencia apostólica cuando no se retira el rostro ante quien lo golpea. Así calló Cristo. El no se dejó aterrorizar por los hombres. Saliendo al encuentro de la turba, dijo con valentía: ¨Soy yo¨. ( Cardenal Wyszynski, citado por Juan Pablo II en su libro ¨Levantaos! vamos¨).
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Rafael Inciarte Bracho
Escritos en el Tiempo