La doctrina militar de Rómulo Betancourt

Alberto Müller Rojas, general activado por el presidente Chávez, es quizas la persona que mejor ha analizado la política militar de Rómulo Betancourt.
Manuel Caballero, sostiene, como ratificación de lo antes afirmado que, ¨tal vez nadie haya analizado con tanta precisión y profundidad la política militar de Betancourt ¨como Müller Rojas.
Por cierto, éste, estando retirado, formó parte del plantel dirigencial de Causa R, cuando ese partido se proyectaba como un gran partido y estaba unido en torno a Andrés Velásquez, Pablo Medina y Aristóbulo Isturiz, este último hoy miembro del Psuv, y además, fue embajador.
Hoy Müller Rojas es de nuevo general activo. Lo trajo a la fuerza armada el presidente Chávez, y está trabajando por la formación del partido chavista citado.
Según Caballero, el general Müller Rojas produjo un ¨tupido y excelente ensayo¨. De este extrae grandes líneas sobre el tema:
1. Betancourt convirtió su Estado Mayor Conjunto en un organismo asesor. Limitó el servcio a 30 años.
2. La incorporación de los oficiales echados por la dictadura.
3. Elevación del nivel de vida de los oficiales.
4. La institución armada percibió más ingresos en el período 1959 a 1063 que los recibidos en la dictadura militar de Pérez Jiménez.
5. El valor físico, es decir su valentía, expresada cuando el atentado, le ganó la admiración de los militares.
6. Las relaciones personales sistemáticas que estableció el Presidente Betancourt con los cuadros subalternos y medios de las fuerzas armadas.
Ya Rómulo desde el ORVE había expresado, como continuación de la línea que había trazado años atras, que ¨el Ejército no es patrimonio privado de ningún prestigio personal, sino el Ejército de la Nación.¨Y que ¨el proceso de democratización de la conciencia nacional no se ha detenido, como ante muralla china, en las puertas de los cuarteles .¨
En Rómulo siempre hubo una idea, podría decirse que un leimotiv, ¨que llevará hasta sus ultimas consecuencias, mientras le quede un soplo de vida: La dirigencia de cualquier movimiento revolucionario no deberá ser militar sino civil .¨
¨ORVE denunciará como traición a la Nación a todos los que quieran sembrar una criminal desconfianza en las fuerzas armadas, o que pretendan llevar la conspiración o el apetito personalista a los cuarteles .¨
No sé si los militares de hoy se sientan a gusto ocupando cargos siendo activos. No sé si se sentiran bien ganando muchísimo dinero. Ganando ? No sé si estarán contentos con la presunta obligación de saludar con ¨socialismo, patria o muerte¨. No sé si se sienten a gusto con la antipatía que generan en la población civil por su genuflexión ante el régimen castrista cubano. No sé si se sentirán a gusto porque la libertad de expresión sea cercenada al pueblo, como se siente ante el caso RCTV. No sé si se sentirán a gusto con promociones que lleven el nombre de Fidel Castro.
La institución militar está, tiene que estar, por encima de facciones políticas. Tienen que estar para garantizar la soberanía nacional y las libertades. En estos días delicados tienen mucho que hacer. Tienen la palabra.
Fuente: Caballero, Manuel. Rómulo Betancourt, político de Nación. Alfadil. Páginas 388 y s.s.