miércoles, 2 de agosto de 2006

La antipolítica y sus efectos

Damon Linker en,La tentación antipolítica, afirma que ¨nada es más humano que el descontento con la condición humana. Y pocos aspectos de la condición humana inspiran más descontento que la política.¨
Ese descontento ha servido para alimentar la llamada antipolítica.
Esta ha derrotado a los partidos, por supuesto, que no los ha destruido ni podrá sustituirlos.
Las fuerzas que la conforman utilizaron a muchos políticos. Luego los dejaron a un lado cuando cayeron en el descrédito.
Ese descrédito, generador de desesperanza, fue propiciado por muchos políticos.
Ya muchos políticos habían pasado a depender de encuestas y asesores.
Para decirlo de otra manera, de creadores de imagenes para ser vendidas en el mercado electoral. Y que conste que eran, esos partidos y políticos, de todos los sectores o de derecha o de izquierda o de centro.
Las encuestas sustituyeron a muchos políticos. Yo diría que al de p minúscula que no al verdadero Político.
Vivían pendientes de la imagen y de la popularidad.
La impopularidad es el mejor ¨atrévete¨del momento. Para hablarle claro al país. Con honestidad. Con valentía para defender valores y principios. Dispuesto a defender las convicciones cueste lo que cueste. Capaz de navegar contra la corriente.
Lo antes expuesto lleva a la definición de Político que además de las características prealudidas, sea democrático, conciliador, capaz de unir, amante del diálogo, pero firme en la defensa de sus posiciones.
Ese Político, así concebido, con una organización política que lo respalde, con programa realista, concreto, es lo que requiere Venezuela para entrar de lleno a superar su crisis que es de cuidado.
Lanzar una candidatura sin organización es grave.
El partido es necesario. Se construye sobre la base de soluciones que no dependen de los avatares de un hombre.
Coincido con quienes consideran a la antipolítica como ¨aventura sin futuro¨ y ¨hacedora de catástrofes¨, como sostiene Fausto Mazó.
Es hora de hablar claro. Es momento para la antipopularidad. Es el presente venezolano para Políticos, Partidos y Soluciones.

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Rafael Inciarte Bracho
Escritos en el Tiempo