miércoles, 4 de enero de 2006

Temblor

Ante un temblor qué hacer.
Antes de responder quiero expresar lo siguiente. Primero, que se trata de un fenómeno de la naturaleza. Segundo, pero será ¿será sólo de la naturaleza? o ¿habrá un contenido humano en su producción?
Respecto a la última pregunta, elevo dos inquietudes a la consideración del lector. Una, que hay quienes sostienen que la mayoría de las cosas del medio ambiente o de la naturaleza provienen de la intervención humana. Quienes deseen investigar lo que afirmo, les invito a leer dos libros de Anthony Giddens. Uno, La Tercera Vía, y el otro, Un mundo desbocado.
La siguiente inquietud: ¿Habrá algún cerebro, haciendo uso perverso de la tecnología con fines criminales o de otra índole malévola creando estos fenómenos para reducir la población mundial? ¿sería de extrañar ante un mundo donde falla la ética y la moral? Dejo esa inquietud para quien quiera profundizar en ella. ¿Será verdad que hay 6000 millones de habitantes en el planeta? Lo dudo. Creo que se han reducido. Saque usted la cuenta de los que han perecido en los últimos años a consecuencia de guerras, fenómenos naturales, plagas, etc. y a lo mejor es verdad lo que acabo de sostener.
Retomando el inicio de estas notas. Respondo. Lo primero es alejarnos de ventanas o de vidrios. Meterse debajo de un escritorio. Taparse la cabeza. Tener radios portátiles. Celulares. Focos.
No dejar que la desesperación le domine.
Orar. Rezar. Acogerse a la voluntad de Dios. Si salimos vivos pedirle a Dios que nos permita adaptarnos a la realidad resultante.
Sólo la fuerza, la fortaleza, espíritual nos ayudará en toda circunstancia aciága.
Escribo estas notas en Maracaibo donde en las últimas cuarenta y ocho horas han habido dos sismos, de 5 grados cada uno, que nos han hecho sentir temblor.

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Rafael Inciarte Bracho
Escritos en el Tiempo