¨Este mes me pone nostálgica y me dan ganas de llorar¨.
Me dijo mi Santa Suegra cuando la fuimos a visitar el pasado Martes en la tarde. Ella tiene 84 años de edad. Lúcida y juvenil.
Yo le dije: Mire la Navidad es una festividad universal hermosa, pero que genera sentimientos y emociones, contradictorios. Alegría, tristeza, canto y llanto.
No quize expresarle que, en la vejez, la tristeza y la ganas de llorar son frecuentes, más en estos días. No es para menos.
La vejez hace pensar que este año pudiera ser el último. Que pronto se estará acompañando, en otra dimensión, a los seres queridos. Al esposo, la esposa, a los padres, abuelos, a los amigos y a los no amigos, acorde con aquello de ama a tu prójimo como a ti mismo, y consciente de que tiene más mérito el amar a quienes no nos aman.
Si algunos bemoles tiene la vejez, es que la persona se va quedando sóla. Al viejo le hace feliz el sentirse siempre acompañado. Uslar Pietri se pronunció al respecto. Se mira hacia atras y no se ve... Ya a él, nadie le visitaba, pocos se acordaban de él.
Una sociedad debe cuidar y proteger a sus viejos. Si no lo hace se convierte en fracasada. Los hijos deben cuidar a sus viejos cuando ya éstos no puedan valerse por si mismo.
En el viejo se concentra la sabiduría.
Volviendo a lo de lo contradictorio, podemos sostener con la canción, que popularizara El Trío Vegajareño, que en Navidad unos van alegres y otros van llorando, y hay unos muy pobres que no tienen nada son los que prefieren que nunca llegara.
Tiene tanto poder la Navidad que en las guerras hay tregua. Me duele que Chávez dijera que no va a descansar y que desde ya se declara en campaña presidencial.
La Navidad hace recordar la alegría y la tristeza.
Nosotros en Maracaibo, en nuestra casa de siempre, le rezamos al Niño Jesús. Le cantamos con furro, cuatro, maracas, y en un paréntesis de la ¨misa oficiada¨ por mi Suegra, pedimos por muchas cosas, especialmente, por la paz, tanto del mundo, como, en especial, la de Venezuela, hoy tan comprometida.
Si quiere saber, quien lea estas notas, lo que es el poder de la Navidad, le invito a leer El Espíritu de la Navidad, de Charles Dickens. Lo comprobará.
Me dijo mi Santa Suegra cuando la fuimos a visitar el pasado Martes en la tarde. Ella tiene 84 años de edad. Lúcida y juvenil.
Yo le dije: Mire la Navidad es una festividad universal hermosa, pero que genera sentimientos y emociones, contradictorios. Alegría, tristeza, canto y llanto.
No quize expresarle que, en la vejez, la tristeza y la ganas de llorar son frecuentes, más en estos días. No es para menos.
La vejez hace pensar que este año pudiera ser el último. Que pronto se estará acompañando, en otra dimensión, a los seres queridos. Al esposo, la esposa, a los padres, abuelos, a los amigos y a los no amigos, acorde con aquello de ama a tu prójimo como a ti mismo, y consciente de que tiene más mérito el amar a quienes no nos aman.
Si algunos bemoles tiene la vejez, es que la persona se va quedando sóla. Al viejo le hace feliz el sentirse siempre acompañado. Uslar Pietri se pronunció al respecto. Se mira hacia atras y no se ve... Ya a él, nadie le visitaba, pocos se acordaban de él.
Una sociedad debe cuidar y proteger a sus viejos. Si no lo hace se convierte en fracasada. Los hijos deben cuidar a sus viejos cuando ya éstos no puedan valerse por si mismo.
En el viejo se concentra la sabiduría.
Volviendo a lo de lo contradictorio, podemos sostener con la canción, que popularizara El Trío Vegajareño, que en Navidad unos van alegres y otros van llorando, y hay unos muy pobres que no tienen nada son los que prefieren que nunca llegara.
Tiene tanto poder la Navidad que en las guerras hay tregua. Me duele que Chávez dijera que no va a descansar y que desde ya se declara en campaña presidencial.
La Navidad hace recordar la alegría y la tristeza.
Nosotros en Maracaibo, en nuestra casa de siempre, le rezamos al Niño Jesús. Le cantamos con furro, cuatro, maracas, y en un paréntesis de la ¨misa oficiada¨ por mi Suegra, pedimos por muchas cosas, especialmente, por la paz, tanto del mundo, como, en especial, la de Venezuela, hoy tan comprometida.
Si quiere saber, quien lea estas notas, lo que es el poder de la Navidad, le invito a leer El Espíritu de la Navidad, de Charles Dickens. Lo comprobará.
HOla, como va!!!
ResponderBorrarLeí SUEGRA por ahí???
Te cuento que mi blog se dedica a ellas. ODIO A MI SUEGRA!
Si quieres pasar.
Nos leemos.
Lei a Dickens por primera vez hace 7 anios. El espiritu de la Navidad lo logra todo, es una energia encantadora que cambia a las personas y vuelve todos nuestros deseos realidad. Feliz Navidad Paito! Tu hija: Mary
ResponderBorrarY LA LEIDO UD LAS PERIPECIAS DEL GRINCH??
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