La propiedad privada tiene contribuciones que cumplir. No es nada nuevo, y es así con la urbana con la agraria y con cualquiera de los distintos tipos de propiedad.
Cuando el propietario cumple con esas contribuciones, por ejemplo, el pago de impuestos, tiene el derecho a que le sea respetado su derecho de propiedad.
Si el Estado, por razones de interés social o público, requiere de una propiedad, p.ej., para construir una carretera, o desarrollar un proyecto agropecuario, debe expropiar.
Expropiar de acuerdo con la Constitución y la ley de la materia. Debe ceñirse, estrictamente, al proceso, para garantizar el Estado de Derecho. Hacer previamente la declaratoria de interés social. Buscar, de ser posible, un arreglo amigable, o ir a un juicio, que culmine en sentencia firme y pago de justa compensación.
La expropiación es constitucional y legal. Es distinta a la confiscación. En ésta el Estado no paga por el bien que le sea quitado al propietario; pero la confiscación es por vía de excepción y expresamente señalados los casos, en la Constitución, por los cuales procede.
La expropiación es un juicio delicado revestido de especiales normas procesales cuyo incumplimiento puede producir efectos nugatorios.
No puede un gobierno democrático, legítimo, apartarse del cumplimiento de ese proceso. Incurriría en arbitrariedad. Violaría la Constitución y la Ley de Expropiación.
En Venezuela el 87 por ciento de los venezolanos quiere que se respete el derecho de propiedad privada. Sienten temor ante lo que está haciendo el presidente Chávez y la razón es fundada. Primero, porque la propiedad es un derecho fundamental, vital, democrático, humano, natural. Segundo, porque ante el discurso de Chávez de proponer a Cuba como el ¨mar de la felicidad, y de proponer socialismo real, donde no hay respeto por la propiedad privada, se está señalando que no se va a respetar ese derecho.
El pueblo venezolano no va a aceptar y comienza a resistir. Vienen momentos difíciles en Venezuela. Qué pasará?
Cuando el propietario cumple con esas contribuciones, por ejemplo, el pago de impuestos, tiene el derecho a que le sea respetado su derecho de propiedad.
Si el Estado, por razones de interés social o público, requiere de una propiedad, p.ej., para construir una carretera, o desarrollar un proyecto agropecuario, debe expropiar.
Expropiar de acuerdo con la Constitución y la ley de la materia. Debe ceñirse, estrictamente, al proceso, para garantizar el Estado de Derecho. Hacer previamente la declaratoria de interés social. Buscar, de ser posible, un arreglo amigable, o ir a un juicio, que culmine en sentencia firme y pago de justa compensación.
La expropiación es constitucional y legal. Es distinta a la confiscación. En ésta el Estado no paga por el bien que le sea quitado al propietario; pero la confiscación es por vía de excepción y expresamente señalados los casos, en la Constitución, por los cuales procede.
La expropiación es un juicio delicado revestido de especiales normas procesales cuyo incumplimiento puede producir efectos nugatorios.
No puede un gobierno democrático, legítimo, apartarse del cumplimiento de ese proceso. Incurriría en arbitrariedad. Violaría la Constitución y la Ley de Expropiación.
En Venezuela el 87 por ciento de los venezolanos quiere que se respete el derecho de propiedad privada. Sienten temor ante lo que está haciendo el presidente Chávez y la razón es fundada. Primero, porque la propiedad es un derecho fundamental, vital, democrático, humano, natural. Segundo, porque ante el discurso de Chávez de proponer a Cuba como el ¨mar de la felicidad, y de proponer socialismo real, donde no hay respeto por la propiedad privada, se está señalando que no se va a respetar ese derecho.
El pueblo venezolano no va a aceptar y comienza a resistir. Vienen momentos difíciles en Venezuela. Qué pasará?
Cóm osigues? cuéntame de tu vida si quieres escríbeme a mi correo, me he quedado preocupado por l oque cuentas en tu blog sobre tu vida en USA.
ResponderBorrarsaludos y todo lo mejor
profeballa